Caminé por su senda y juntando vaivenes de tu vigilia
traté de encontrarte.
Conmovida por esa penumbra que siempre emociona
a la vez que me detiene;
quería verte aun sabiendo que faltabas a la cita
una vez más.
Sabes que soy débil e inestable, que cuando te leo
tengo silencios por no querer entender,
que entre mis manos ya no están las tuyas.
Que tus fotos y cartas durmieron entre humedad
y aromas enmohecidas de un incienso rancio.
Insensato tiempo que siempre avanza
y hace deslizar los álbumes sobre las azules
paredes del portón fronterizo de geranios.
Más tu señal, fue recibida a tiempo,
al inicio de este día: My Way
M.
Jueves 02-04-2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario