miércoles, 17 de diciembre de 2008

Y la lista va a continuar... (parte I)


Hay estos hijos, de pequeños pasaron a ser muy altos,
y yo quedé en otro tamaño.

Cuando pienso que ellos, inicien el camino que deseen
seguir. Que ya no necesitarán de mi mano, para llevarles
al cine, a la escuela, a Misa, a una fiesta, a que lleven
sus trazos en el cuadrado indicado. Que las crayolas, no
salgan del margen.

Que peguen las figurillas, dónde deben hacerlo, que no dejen
sin tapa la pasta de dientes, que dejen las toallas en su sitio,
que apaguen la therma, que no olviden de rezar, de apagar la
tele, de echar la llave, de ponerse la chompa.
Que no compren dulce en la vía pública, que no coman más popcorn,
que no se mojen si están enfermos, que tomen su medicina,
que se abriguen el cuello , que tomen su pastilla para la garganta,
que no hablen con extraños, que...
uf....luego sigo...


quién cree que escribe esto???

2 comentarios:

Lupita Jones dijo...

Esa mano siempre será necesaria.
sin esa mano nuestros caminos no serian lo que son.
con tropiezos y exitos son caminos en que no vamos solos pq siempre estaras para apoyarnos.

Anónimo dijo...

Me gustaría saber, también, algo de la otra mano que he conducido.

Gracias por la emoción que he sentido al leer sus palabritas, que han brotado de un tierno e inocente corazón.
La verdad, Ud., no conoce todo el mundo, que ha veces es inabitable por almas como la suya.
Tampoco, por la del personaje ausente, que usa más mensajes de texto que un abrazo.